lunes, 17 de enero de 2011

2011



Hace más de unos 365 días que dejé mi blog, no tanto por que no tuviera que escribir sino por que encontré otros dos medios para hacerlo. No se porque sucedieron las cosas que sucedieron en estos últimos meses. De un punto llegó otro y luego otro y otro más, hasta volver al principio, bien dicen que el universo es infinito.
Ahora que me he dado cuenta también, de que tengo muchas cosas para hablar y platicar, pero dadas las situaciones emocionales y mi preferencia por la soledad, no hay ninguna persona capaz de entender tantas palabras procesadas por mi cerebro. No no la hay, por el momento. Así que un día decidí empezar a hablar y dejar que las palabras se fueran, pero esto fue creo yo, la peor de las opciones, no tanto por que no me gustará (amo el sonido de mi voz, de hecho por eso alguna vez fui locutora de radio) sino por que eran cosas demasiado buenas para dejarlas ir. Ahora no las pienso dejar ir, pero como hablar de tanto si tengo miles de maneras de escribir. Bueno pues escribiré las reseñas de mi vida, no bitácoras ni páginas similares a las de un diario, más bien. . . reseñas. Estoy resurgiendo y no me voy a detener.

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